Como ejemplo tras la campaña de 1939/40, la Real Sociedad perdió a sus dos mayores promesas, el portero Ignacio Eizaguirre y el delantero Epi, que fueron fichados por el Valencia CF. Al frente del equipo como entrenador se encontraba Sebastián Silveti. Poco antes de finalizar la guerra, en los primeros meses de 1939, se jugó el Campeonato Regional de Guipúzcoa, ya con carácter oficial, en el que el Donostia FC fue subcampeón y obtuvo su clasificación para el Torneo Nacional de Fútbol, que organizaron las autoridades ganadoras del conflicto en los primeros meses de posguerra y donde el Donostia fue eliminado por el futuro subcampeón, Racing de Ferrol, equipacion psg en cuartos de final.